Colección Historias Cortas pt. 9
Caminantes Diurnos pt 3
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Al entrar el oficial Gregory
pudo encontrar cuerpo tras cuerpo, aun si todos estaban inconscientes no veía
el objetivo de dichos movimiento, se suponía que estas instalaciones era una de
las tres principales, que pertenecían a uno de los más importantes chupasangre
de la ciudad.
Ahora un vampiro estaba
entrando en su territorio, era un conflicto interno, una lucha de poder, no
podía encontrar una respuesta clara a ninguna de las cosas que empezarían a
ocurrir.
Con arma en manos avanzo por
los pasajes de color beige monótono y con cada avance encontró más y más cuerpos,
tanto humanos como chupasangre.
-Qué demonios es este lugar?
Su pregunta fue más que clara
al encontrarse con las prendas ensangrentadas de las múltiples personas
desaparecidas de toda edad y genero junto a las fotografías de cada uno y
particularmente encontró uno que le llamo la atención, tomo la foto y continúo
su camino.
*****
Las quejas a viva voz llegaron
a sus oídos mientras caminaba entre los pasillos, el aroma comenzó a arruinar
lo que incentivaba su instinto, aun lo incomodaba en todo este tiempo no podía
identificar qué pero sabía que debía detener esta incomodidad.
-Solo un poco más, pequeña
quiero ver tu sangre solo déjala fluir
-Creo que eso es de mal gusto.
-JAJAJAJAJAJ! Increíble, quien
pensaría que volvería verlo
Su macabra sonrisa salió
natural, su dolor de cabeza comenzó de nuevo pero más intenso que nunca.
-Veo que algunos traumas quedan
¿no?, aun me recuerdas o solamente es el remanente de lo que antes fue.
De manera extraña la ira se
intensifico en su cuerpo, pudo darse cuenta este sujeto era fuerte pero él ya
no era la persona que antes había sido, su fuerza era mayor y su pensamiento
frio le garantizo la calma, era el momento de demostrar lo que podía ser capaz,
después de todo ya ni siquiera contaba como humano ahora.
*****
Eso no es humano.
Ella observo aun con sus
pensamientos en confusión y cada uno de sus movimientos restringidos, las
escenas pasaron frente de si un joven probablemente en sus veinte y aquel
hombre corpulento intercambiando golpes e incluso así aquel joven ni se
inmutaba se lanzaba contra él vertiginosamente saltaba encestando golpes en su
rostro la diferencia entre sus tamaños daba complicaciones al más joven, pero
aun así ella pensó él es quien ahora estaba salvándole la vida.
Fue tomado totalmente por el
pecho con una sola mano, el hombre corpulento le observo con desdén mientras lo
levantaba y arrojándolo con fuerza contra la pared dos detonaciones seguidas se
escucharon y con ello dos heridas aparecieron en el pecho del corpulento
hombre.
-Alto! Policía.
El hombre corpulento comenzó a
correr saliendo por el parqueo de aquella residencia mientras el joven le perseguía
de cerca, el oficial Gregory estaba por iniciar la persecución cuando el joven
en sus veinte volteo y le recordó a viva voz, la chica que se encontraba en la
camilla inconsciente lo cual detuvo en seco al oficial en su persecución.
-Yo me encargo! Véala a ella
-…
Midiendo el pulso de la joven
inconsciente, su compañero llego pero ahora ya era muy tarde, los había
perdido.
*****
-Qué demonios está pasando?
-No lo sé, eso intento
averiguar
-A qué se refiere jefe?
-No tengo ninguna pista, pero
encontré esto.
Mostró la fotografía que había
tomado antes de aquella habitación, su socio observo con cuidado y alcanzo la
misma conclusión que él, aun siendo compañeros él siempre tuvo la costumbre de
llamar a Gregory jefe ya que en las oficinas de la policía actualmente Gregory
era veterano entre veteranos, por eso si él tenía una corazonada sobre algo
debía ser importante por tanto con toda seriedad y sin reparo respondió.
-Ese es…
*****
-Volví
-Eres idiota o solo te haces el
idiota
-Oye, y eso de donde vino
-En serio, aun lo preguntas,
desmantelar una organización criminal, crees que no sabemos qué haces después
de cumplir con los pedidos del anciano.
Mientras recibía reprimendas de
Rubí, Nick intervino el discurso de la joven intelectual del grupo y transmitió
el mensaje que le había sido encomendado.
-Estas en problemas, el anciano
Lann te llama
-Entiendo, iré.
*****
-Encontraste lo que buscabas?
-No lo logre
-Ya veo, estas llamando
demasiado la atención, y ahora ya no puedo cubrirte, El Canciller del Norte
empezó a moverse, está totalmente interesado en lo que estás haciendo.
-¿A lo que hago?
-Estas atacando los
laboratorios del Monje, eso traerá consecuencias hacia nosotros y el Canciller
es un tanto temperamental cuando se trata del Monje, mi consejo es que
desaparezcas por un tiempo, no salgas y no intervengas o llamaras la atención
más de la cuenta.
-Entiendo, si mis acciones ponen
en peligro al clan, lo evitaré en cuanto pueda.
-Eso espero, nuestro clan solo
consta con cinco personas contándote, no estamos en condiciones de pelear
además ya no soy lo que fui, aun con mi inmortalidad mi debilidad aumenta más y
más con el paso del tiempo, por eso lo siento, pero si algo ocurre no podremos
intervenir e incluso podría morir alguno de ellos.
-Entiendo, lamento causar problemas,
pararé por un tiempo después de todo les debo mucho, como para causar la muerte
de alguno.
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